miércoles, 22 de junio de 2016

¿ Quién fué Heinrich Hofmann?

Un día como hoy 23 de Junio pero del año 1911 a finales del siglo XIX muere el pintor alemán Heinrich Hofmann quien fuera el autor de la obra “La Imagen del Señor”.

 

A continuación me permito compartir con ustedes un extracto de la conferencia La Simiente no Hereda con la Paja predicado el 19 de Febrero de 1965 donde el Reverendo William Branham hace alusión a esta obra .

..."Y mientras estaba acostado en el porche, fui despertado repentinamente, y una carga vino sobre mi corazón por mi padre. Como, muchos de Uds. aquí de la ciudad conocieron a mi padre. Yo creo que él era un gran hombre, aunque era un pecador. Y, pero él tenía un mal hábito, lo cual yo traté de combatir contra esa cosa tan fuerte como pude, a través de la edad, eso es la bebida. Y aquella noche él estaba bebiendo. Y yo me levanté con una gran carga sobre mi corazón por él. Y sólo con mi pijama puesta, me puse los pantalones, con mi camisa de pijama todavía puesta; caminé a través de ese campo de retama, más o menos hasta donde está esto aquí ahora; y me arrodillé para orar por mi padre.

Y mientras oraba y le pedía a Dios que le salvara y que no lo—lo dejara morir como pecador, y que yo lo amaba; y mientras estaba en oración, me levanté para mirar hacia el este, desde aquí, y vino una visión. Y parado justamente arriba de mí (muchos de Uds. saben de la visión), estaba el Señor Jesús.

Ahora, yo no soy alérgico a ilusiones, hasta donde sé. Pero las visiones son reales. Y allí estaba parado el Señor Jesús, la primera vez que yo le había visto a Él en una visión de esa clase. Él estaba como, oh, probablemente a diez pies sobre mi cabeza, parado en medio del aire, con un pie como dando un paso. Él tenía puesto una vestidura blanca, con una franja alrededor del lado. Tenía pelo hasta Sus hombros. Parecía ser como, un Hombre como la Biblia dijo que era, como de treinta. Pero un Individuo pequeño, de constitución delgada, muy pequeño, parecía como si no pesaría más de ciento treinta libras.

Yo miré y pensé que había algo, de que yo pudiera estar equivocado. Así que yo—yo froté mis ojos y—y miré hacia arriba de nuevo. Y Él estaba parado como de lado, como un perfil de Su rostro. Y la apariencia de Su cara, la cual siempre he visto en visiones, ha sido como el rostro de Cristo por Hoffman a los treinta. Esa es la razón que yo tengo eso en mi casa, en mi literatura, donde quiera que pueda ponerlo, porque así era como parecía, más o menos así. Solamente que Él parecía ser pequeño.

Y mientras yo lo miraba a Él, pensé: “Seguramente no estoy viendo a Mi Señor parado allí”. Y yo estaba como digamos en esta posición, y quizás justamente donde esto debajo de donde este púlpito está ahorita. En alguna parte, era en esta cercanía, entre, con un radio de donde estoy parado, lo mejor que pude medir, entre cuarenta a cincuenta yardas por este distrito aquí, este círculo.

Yo miré hacia arriba y Él estaba parado allí. Me mordí el dedo, para ver si estaba dormido. Uds. saben cómo uno… Parecía como que eso no pudiera ser así. Y yo era joven en el Señor en ese entonces, llevaba como seis meses de estar predicando. Me mordí el dedo. Tomé la retama y la quebré. Y muchos de Uds. que viven en el campo, saben cómo es ese pequeño palillo, en la retama. Empecé a masticar eso. Y dije: “Esto—esto no puede ser. Yo estoy soñando. Allí está mi casa. Allí está mi padre, madre y los niños allí. Allí está el viejo estanque junto a la casa de ladrillos que antes estaba aquí abajo, donde yo solía cazar patos, como a doscientas yardas más allá de esto. Y aquí estoy yo parado en el campo; tiene que ser así”.

Pateé contra el suelo, pisé duro con los pies un poco y sacudí la cabeza, y—y me froté las manos; miré hacia arriba de nuevo, aparté la mirada, miré de nuevo, y allí estaba Él, parado allí. El viento empezó a soplar, y vi la retama moviéndose. Y cuando empezó a soplar, Sus vestiduras se movieron. Como las ropas colgadas en una cuerda, empezaron a—a moverse. Él estaba parado allí. Yo lo miré.

Y pensé: “Si tan sólo pudiera mirar Su rostro!”. Y Él estaba mirando hacia el este, en esta dirección. Él estaba mirando intensamente. Yo me moví, para dar un paso, para mirar de cerca Su rostro. Y con todo eso no podía verle muy bien. Él tenía Sus manos frente a Él, un poco escondidas de donde yo estaba parado.

Volví a moverme. Y aclaré mi garganta, algo así, hice: “jum”, para ver si podía llamarle la atención. Pero Él nunca se movió.

Entonces pensé: “Quizás lo llamaré. Cuando dije: “Jesús”, Él volteó Su cabeza. Y cuando Él me miró, solamente extendió Sus brazos. Eso es todo lo que recuerdo. Pues, hasta casi el amanecer yo estuve tendido en el campo, por aquí en algún lado donde ahora está este lugar; la camisa de mi pijama toda mojada con lágrimas, donde yo había estado llorando. Y yo me había desmayado.

Su rostro tenía características que ningún artista podría—podría dibujar o pintar. Ellos no podrían hacerlo. Él se veía como un Hombre, que si Ud. lo mirara, Él desearía llorar con compasión, y respetar con reverencia; y aún con suficiente poder, que si hablara, eso haría que el mundo se volcara. Y las características nunca podrían ser captadas por un artista..."

Espero que este texto le sirva de informacion, estudio y crecimiento espiritual, Gracias por visitar mi modesta página.

 José Carvajal
(licenciado en Teología)
 

Tomando como fuente  Wikipedia  veremos la biografía de este personaje Heinrich Hofmann para conmemorar su muerte hace ya 105 años.

Johann Michael Ferdinand Heinrich Hofmann (Darmstadt 19 de marzo de 1824 – Dresde 23 de junio de 1911) fue un pintor alemán de finales del siglo XIX.

Creció en una familia que albergaba un profundo interés en el arte. Su padre, abogado Heinrich Karl Hofmann (1795-1845) pintaba acuarela y su madre Sophie Hofmann (1798-1854) fue profesora de arte.



Hofmann recibió sus primeras lecciones en el arte desde el grabador de cobre Ernst Rauch, en Darmstadt. Luego, en 1842, entró en la Academia de Arte de Düsseldorf y asistió a las clases de pintura de Theodor Hildebrandt. Más tarde, fue aceptado en el estudio de Wilhelm Von Schadow y allí creó su primera gran pintura: Una escena de la vida de Alboin, rey de los Longobardos.



Posteriormente, viajó Holanda y Francia a intensificar sus estudios de arte. En 1846, Hofmann, visitó la Academia de Bellas Artes de Amberes. Después de pasar un largo período de tiempo en Múnich regresó a Darmstadt. En 1853, Hofmann volvió a Darmstadt, conmovido por la muerte de su madre, pinto su primera gran obra religiosa «Entierro de Cristo.»



En el otoño de 1854, inició un viaje a Italia. Su primera parada fue ya en Venecia, y aprovechó el tiempo allí para estudiar Giorgione, Bellini y de Giotto (en la cercana Padua). Tras haber procedido a Florencia - Hofmann donde permaneció durante dos meses - que luego fue a Roma en enero de 1855. La correspondencia completa con su familia y sus informes diario detallado transmitir una impresión de su manera de pintar en ese momento. Estaba profundamente impresionado por la obra de arte de la Antigüedad, el cristianismo y el Renacimiento.



En 1859 se casó con Elisabeth Werner, de cuyo matrimonio no tuvieron hijos. En 1862 se trasladaron a Dresde donde fue designado sucesor del Profesor Johann Carl Baehr de la Academia de Arte de Dresde. En 1872 le concedieron la Gran Medalla de Oro y más tarde recibió la Medalla de Albrecht-el rey Alberto.



En 1891, la esposa de Hofmann murió y poco después se retiró de la Academia de Arte de Dresde. Fallecería un 23 de junio de 1911.


Obras

Cuatro de las obras más famosas de Hofmann se encuentran en la Iglesia Baptista de Riverside de Nueva York: «Imagen de Cristo», «Cristo y el joven rico», «Cristo en Getsemaní» y «Cristo en el templo.» Fue uno de los pintores más importantes de su tiempo, el más influyente pintor alemán contemporáneo.

Tres de sus cuadros fueron adquiridos por John D. Rockefeller, Jr.: Cristo en el Templo (1871), Cristo y el joven Rich Man (1889), y Cristo en Getsemaní (1890). Estos ahora se muestran en la iglesia Riverside de Nueva York.


  • ·         Escena de la vida de Alboin, rey de los Longobardos, 1845.

  • ·         Heinrich von Gagern de 1848, primer retrato, posesión de la familia Gagern.
  • ·         Heinrich von Gagern de 1848, segundo retrato, Stadtmuseum Stettin.
  • ·         Justus von Liebig, de 1849, propietaria la Reina del Reino Unido.
  • ·         Peter von Cornelius, de 1850, Instituto Mathildenhöhe, Darmstadt.
  • ·         Entierro de Cristo, de 1854, se desconoce el propietario.
  • ·         El arresto de Cristo, 1858, Museo estatal de Hesse, Darmstadt.
  • ·         Santa María con el Niño Jesús y los Apóstoles, 1860, retablo de la iglesia de Obermörlen (Hesse).
  • ·         Cristo resucitado, 1867, retablo de la iglesia en Vaeggerlose, Dinamarca.
  • ·         La mujer adúltera ante Cristo, 1868, Gemäldegalerie Neue Meister, Dresden.
  • ·         Dibujos para el Shakespeare Brockhaus-Galerie, 1870.
  • ·         Predicación de Cristo en el Mar de Galilea, 1875, destruido en la Segunda Guerra Mundial.
  • ·         El compromiso del príncipe Albrecht von Wettin con Zedena von Böhmen, 1878, pintura mural, Albrechtsburg, Meißen.
  • ·         Apoteosis de los héroes de la tragedia griega, 1876, Teatro Real, Dresden.
  • ·         Jesús en el Templo (original), 1881, Gemäldegalerie Neue Meister, Dresden.
  • ·         Jesús en el Templo (copia) 1882, iglesia de Riverside, Nueva York.
  • ·         Jesús en el Templo (copia) 1884, Kunsthalle de Hamburgo.
  • ·         Remember Me, 1885, dibujos que ilustran la vida de Jesús.
  • ·         Venid a mí, 1887, dibujos que ilustran la vida de Jesús.
  • ·         Cristo con María y Marta, 1888, propietario privado, Los Ángeles.
  • ·         Cristo y el joven rico, de 1889, iglesia de Riverside, Nueva York.
  • ·         Cristo en el Getsemaní, de 1890, iglesia de Riverside, Nueva York.
  • ·         Paz a vosotros, 1891, dibujos que ilustran la vida de Jesús.
  • ·         La imagen del Señor, 1894, la iglesia de Riverside, Nueva York.

La Imagen de Cristo
Jesús en el Templo
Jesús y el joven Rico

Cristo en el Getsemani
Espero que este texto le sirva de informacion, estudio y crecimiento espiritual, Gracias por visitar mi modesta página.

 José Carvajal
(licenciado en Teología)